Aunque el término “Tolerancia” se a vuelto de moda en los últimos años consecuencia de un conocimiento más amplio sobre los derechos entre grupos humanos y el constante esfuerzo por una equidad y exposición de aquellas conductas que estuvieron guardadas o escondidas por miedo al rechazo, odio, entre otros sentimientos; es fácil la confusión entre las acciones que implican el tolerar a comparación del respeto y aceptación de hechos o acciones.

La psicóloga Ysolina Uzcategui, quien se ha dedicado al área clínica y organizacional, comenta:

“En mi opinión la tolerancia, no necesariamente es respeto. Yo puedo tolerar algo y no necesariamente lo acepto, es decir, a la hora de tolerar no me desbordo en la tendencia de rechazo a esa circunstancia, pero puedo no compartir la misma opinión.”

Es típico escuchar en las calles la frase \»lo tolero pero no lo comparto\», siendo una burla o falta de respeto para algunos grupos de seres humanos, mientras es un avance impresionante para otros. Por esta razón, es importante reconocer y trabajar la tolerancia como este primer escalón que nos guía a desarrollar una madurez en la conducta logrando identificar aquello temas difíciles que no rechazamos en su totalidad y los temas que hemos alcanzado el nivel de respeto y aceptación sintiéndonos cómodos con la elección en la forma de vida e ideas adquiridas en este proceso.

¿Y vos, llevás un camino de tolerancia o respeto?